No existes

Que suave y dulce es verte sonreír

Cuando la brisa detiene su pulso para mirarte a los ojos…esos ojos tan bellos…tan libres y sinceros.

Eres hermoso y perfecto cuando vives en mis sueños y te alimentas de mis recuerdos…eres tan brutalmente salvaje en mis pensamientos que el fantasma de tu sombra se me hace terrible.

Esa noche en la quebrada donde las olas rompían sus cascos prometiste existir y nunca dejarme, esa noche de estrellas celosas, luna vieja y viento perezoso fuiste por primera y última vez sincero…cuando los estrechos márgenes del odio se cerraron y la violencia gritó con vehemencia al firmamento azul ya sangrando negros abismos, supe que decías la verdad…la verdad cuando te evaporabas en una última mirada frente a mis marchitados ojos…una vez más la ilusión minó las ansias de la realidad y desperté con los pies fríos y el corazón templado porque otra vez te habías ido, pero esta vez para no volver jamás.